Jodhpur, la ciudad azul (post fotográfico)
Lo cierto es que cada ciudad en India tiene tantas caras como habitantes (millones). Jodhpur es la ciudad azul porque sus casas, casualmente, son azules; Pero también es una ciudad perfecta para perderse caminando y sacando fotos. Como muchas veces las palabras no alcanzan, los invitamos a recorrer la ciudad en esta galería de imágenes. Acá vamos:
Jodhpur es una ciudad así de grande…
Llena de calles laberínticas que no respetan ningún ángulo recto. Nunca te llevan al lugar que esperas. Cada intersección es una mini rotonda de donde salen varias callejuelas. Cada esquina es una aventura…
Pero, por sobre todo, lo más curioso es que las casas son azules. ¡Un pueblo entero pintado de azul! Algunos dicen que los Brahmanes (sacerdotes) pintaban su casa de azul para diferenciarse, y luego el resto los copió, otros dicen que es para repeler los insectos o para mantener frescas las casas, lo cierto es que crean un clima ideal para caminar, perderse y sacar fotos…
Cada escalera que encontramos es una invitación para encontrarnos con una historia por contar…
Algunos nos saludan desde las puertas…
Y otros nos saludan desde los techos…
Algunos nos invitan a charlar…
Y están también los que nos invitan a jugar…
Uno pasa caminando por la calle, te llaman, te piden que le saques una foto, luego que se la muestres, y después te invitan a pasar a tomar un chai (te típico del país). Muchos nos dan su dirección para que les enviemos las imágenes por correo. Cada casa por la que pasamos es una invitación. Algunos llaman a todos sus familiares para presentarnos, otros nos pidén que tomemos a los bebes en brazos o que toquemos a las cabras para darles suerte y que produzcan más leche. Nos ven llegar hablando una lengua extraña, vestidos de otra manera, con cámaras de fotos que inhiben a más de uno y con una mirada de extrañeza con respecto a todo lo que ocurre alrededor. Ellos también nos sacan fotos a nosotros y se sorprende cuándo les decimos que hace 8 meses que estamos en India.
Pero, para nosotros los extraños son ellos…
Algunos bigotes también nos parecen extraños
Y esos mismos hombres, cuando empieza a caer el sol, se juntar a jugar a las cartas…
Mientras que otros pasean por los mercados…
Pero nosotros nos fuimos a ver el atardecer desde el fuerte que custodia la ciudad…
La mayoría de las veces hay que salirse de los caminos establecidos para hacer diferencias. Hay que elegir subir escaleras, doblar en la esquina y cruzar una calle. Hay que perderse en el laberinto. Si solo nos hubiésemos dedicado a conocer lo que dicen que podemos conocer, nos hubiésemos perdido todas las historias que esperaban por ser contadas. Que distinta sería nuestra percepción (de la ciudad) si simplemente nos dedicábamos a mirar por la ventana…